Actualmente,
en Puerto Rico hay practicamente un restaurante en cada esquina. La industria
de servicios de comida y bebida abarca unos 4,000 establecimientos. Hay para
todos los gustos: fast foods, fine dining, comida criolla, mexicanos, peruanos,
cubanos, italianos, orientales, cadenas de franquicias, Mesones Gastronómicos,
pizzerías, steak houses, marisquerías … y si sigo no termino. Pero… ¿cómo
comenzó toda esta revolución de salir fuera de las casas a comer?
Hace
algunos años atrás, no era tan fácil salir a cenar a un restaurante. Primero, se
consideraba un lujo; segundo, no había tantas opciones. Temprano en los 1900,
abundaban las fondas, donde los viajeros paraban a comer algo para luego seguir
su camino.
La historia
dice que el primer restaurante en Puerto Rico fue La Mallorquina, especializado en comida puertorriqueña. Este fue
fundado en 1848, pero no fue hasta el 1926 que comenzó a ser operado como
negocio familiar. Cerró sus puertas a principios de este año, a pesar de que
seguía siendo muy famoso por su comida y su acogedor salón comedor decorado con
objetos de siglos anteriores.
En 1953 nació
El Zipperle, restaurante español con
toques criollos. Fue una revolución culinaria para la época por su intachable
servicio y su menú sofisticado. Todavía sigue siendo uno de los favoritos de
los ejecutivos y para celebraciones familiares.
Con la
llegada de los cubanos a partir de 1960, nacieron restaurantes como Metropol, que todavía nos deleita con
sus deliciosas especialidades, La
Zaragozana y El Cid. Estos
introdujeron la comida cubana a la isla, muy parecida a la nuestra pero con
algunas variaciones. También en esta década se abre la isla al turismo y con
esto llegan grandes chefs de diferentes partes del mundo.
A partir de
ese momento, la cocina puertorriqueña tuvo grandes cambios o fusiones con otras
gastronomías del mundo. Gracias a ello, la variedad que nos ofrecen nuestros
restaurantes actualmente es infinita. Y esto, ciertamente, ha provocado un
cambio en el comportamiento del puertorriqueño quien ya no sale a comer fuera por
necesidad sino en búsqueda de una nueva experiencia gastronómica.
Labels: comida española, comida típica, historia restaurantes, Puerto Rico, restaurantes, san juan la mallorquina